La responsabilidad es un valor que define nuestra capacidad de decidir razonadamente y asumir las consecuencias de nuestros actos. Es una cualidad que se enseña, idealmente desde la infancia y se adquiere y perfecciona con el tiempo y la experiencia.

Educar niños y niñas para que sean responsables implica una gran dedicación y paciencia. Es una tarea a largo plazo que los ayudará a desarrollar habilidades personales, sociales y a establecer vínculos y buenas relaciones laborales a largo plazo. 

Para fomentar el sentido de la responsabilidad es recomendable comenzar a fomentar poco a poco el compromiso: aceptar sus errores, tener independencia en sus deberes escolares y domésticos, respetar a los demás y cumplir las normas, entre muchas otras cosas que te estaremos contando a continuación para ayudarte a lograr que tus hijos sean responsables.

3 trucos para hacer que tu hijo comience a ser responsable 

1. Demuestra una actitud positiva con respecto a la educación

Para fomentar la responsabilidad escolar es primordial que tu hijo/a entienda que hacer la tarea no es malo, ni tiene por qué ser pesado o aburrido. Ahora que la modalidad de aprendizaje principal es la enseñanza virtual desde casa, debemos tener una actitud positiva con respecto a la educación para que los niños y niñas no pierdan la costumbre de estudiar.

Los niños imitan lo que ven, son como una esponja que absorbe lo bueno y lo malo: mostrarte como alguien optimista, centrado y con buena actitud cada vez que deban hacer actividades escolares hará que ellos también se sientan igual y que su percepción hacia el estudio y el aprendizaje sea positiva.

2. Monitorea sus actividades

Fomentar la autonomía con buena disposición para que hagan las tareas por su cuenta es esencial (por esto es tan importante el punto anterior).

Dependiendo de la edad de tu niño o niña será necesario que chequees de vez en cuando cómo va con sus actividades. En este sentido, hablamos de supervisarlos, no de vigilarlos. Dado que la responsabilidad se adquiere entendiendo que lo que hacen es valioso para ellos y para alguien más, es buena idea recordar esto cada vez que los niños hagan su tarea doméstica o escolar. 

De esta manera demostramos confianza en ellos y también fomentamos la independencia y autonomía para que hagan sus deberes correctamente sin necesidad de que un adulto esté presente.

3. Enséñale a valorar y respetar su tiempo y el de los demás

Además de ayudarles a ser productivos, este truco también fomenta el sentido de la responsabilidad. Puedes comenzar con retos fáciles como “si terminas esta tarea antes de las 4:30, tendrás más tiempo para jugar”, lo cual además de ser un agente motivante implica que cumplir con las responsabilidades también rinde frutos. 

Al ser el tiempo libre fundamental para el desarrollo del menor, no se trata simplemente de enseñarle a organizar sus tareas de la escuela, sino también a aprovechar el tiempo libre de buena manera.

4. Sé paciente 

Como mencionamos al comienzo, fomentar la responsabilidad en los niños implica una gran dedicación y paciencia. La práctica hace al maestro. Fomentar diariamente el sentido de la responsabilidad los hará ser mejores adolescentes y adultos. 

No se trata solo de enseñarles a ser organizados y puntuales con las tareas de la escuela, sino también de enseñarles el valor del tiempo con acciones simples y significativas en cada aspecto de la vida diaria para que estén mejor preparados y se desenvuelvan con soltura en su vida diaria.

La realidad de muchos

Por desgracia, no todos los niños tienen la oportunidad de demostrar qué tan responsables pueden ser, bien sea porque no tienen acceso al sistema educativo o porque hay carencias y falta de atención en su hogar. 

A veces, el único sentido de responsabilidad que se genera en los niños más vulnerables viene solo de la colaboración doméstica dentro del seno familiar y la explotación laboral que sufren aquellos que viven en entornos más conflictivos. 

Todos los niños y niñas merecen las mismas oportunidades educativas, sin importar de dónde vengan.

Todos los niños y niñas merecen criarse en un entorno que fomente y celebre los valores y sus buenas acciones.

Todos los niños y niñas merecen una infancia digna y feliz.

Para lograr esto, en World Vision Chile trabajamos con una amplia diversidad de programas que fomentan valores como el respeto, la solidaridad, así como la educación y la crianza con ternura. Asimismo, brindamos oportunidades para que se desarrollen sanamente y sean capaces de reconocer y actuar ante cualquier situación de violencia o vulneración de derechos. 

No obstante, para seguir brindando estos programas formativos orientados a la niñez de las zonas más vulnerables de Chile necesitamos de tu ayuda. 

Te invitamos a ser parte de la historia feliz de un niño mediante nuestro programa de socios o donantes únicos, al cual puedes acceder haciendo clic en la siguiente imagen: