Campaña "1.000 niñas" busca visibilizar demandas de niñas y adolescentes

World Vision Chile
miércoles 12 de marzo - 2025En el marco del Mes Internacional de la Mujer, la ONG World Vision Chile lanzó una campaña destinada a visibilizar la lucha que miles de niñas y adolescentes del país realizan por la protección de sus derechos. La campaña “1.000 niñas”, protagonizada por ellas, pretende poner foco en el fortalecimiento de su empoderamiento, entregándoles una voz para dar a conocer sus demandas por la equidad e igualdad de género.
“Si luchas por un cambio, 1.000 niñas te esperan”, es el lema principal de la iniciativa, donde aparecen niñas y adolescentes diseñando y portando pancartas para posteriormente salir a manifestar sus derechos. “Quiero ser abogada para crear un mundo justo para las mujeres”, “Libres, poderosas, sin miedo”, “Hasta que la desigualdad no sea tema”, “Si te lo propones, lo lograrás todo”, son algunas de las consignas que escribieron las menores de edad y adolescentes en sus carteles durante un taller de cartelería guiado por dos ilustradoras profesionales, Nicolle Herrera y Javiera Aristides.
“La campaña es un llamado urgente a poner atención a las demandas de las niñas y adolescentes, especialmente de aquellas que se encuentran en situación de vulnerabilidad. En general, ellas no tienen los espacios para expresarse y plantear sus necesidades e intereses; por lo tanto, esta es una instancia para incorporar sus voces, ya que son ellas mismas las que se expresan a través del arte y de los mensajes que nos entregan para redes sociales", dice Cristina Carvallo, especialista en género de World Visión Chile.
Por su parte Alex Iturriaga, director de sostenibilidad de la ONG internacional enfocada en la protección de los derechos de niños, niñas y adolescentes, agrega que la campaña '1.000 niñas' aspira a que 1.000 mujeres se conviertan en madrinas de 1.000 niñas en situación de vulnerabilidad, contribuyendo así a mejorar su presente y su futuro. "Al amadrinar a una niña, puedes establecer un lazo cercano con ella y a través de éste contribuir a fortalecer su autonomía individual y fortalecer su capital social, y así hacer posible un cambio en la trayectoria de estas niñas que generalmente viven en contextos de vulnerabilidad social y económica", dice Iturriaga.
Para respaldar la urgencia de esta causa, las cifras proporcionadas en un estudio del año 2023 por la Fundación Amparo y Justicia hablan por sí solas. De acuerdo a este, los casos de abuso sexual aumentaron un 45% entre 2019 y 2023, siendo las niñas y adolescentes las mayores víctimas. Según estas cifras en 2023, el 86% de las víctimas de explotación sexual fueron niñas y adolescentes mujeres, con un 64% entre 14 y 17 años.
VOCES DE LAS NIÑAS Y ADOLESCENTES
Ayelen (19), participante del taller opina: “Yo creo que las mayores injusticias que se dan son los prejuicios, no solamente del género opuesto, sino que entre las mismas mujeres. Eso es lo que nos evita crecer y avanzar. Mi consejo para las niñas es que puedan alzar la voz y si son más tímidas y no tienen la fuerza de hacerlo, puedan acercarse a alguien que le tengan esa confianza para que cada vez que estas cosas que le están pasando se hagan visibles y no sean normales de esconder”.
Martina de 9 años, otra participante del taller, dice: “La pasé muy bien, fue muy entretenido, y lo que más me gustó es que pude conocer a más niñas que están en World Vision”. Además, contó que le gustaría estudiar biología terrestre para conocer a los animales y dónde viven. “Yo pienso que las niñas deberían estudiar lo que a ellas les guste porque ellas tienen ese derecho”, agregó.
Francisca (16), opina: “Conectar con otras mujeres, niñas y jóvenes fue una experiencia muy linda, y grata de corazoncito. Este tipo de actividades es importante porque ¿quién conoce mejor nuestra realidad más que nosotras mismas? Por eso es importante que nosotras alcemos la voz y tengamos estos espacios, para poder llegar y que cuando se tomen decisiones nos tomen en cuenta a nosotras”.
Antonia Figueroa (18), estudiante de derecho, dice: “Yo creo que una de las mayores injusticias hacia las mujeres y las niñas es la falta de participación, por ejemplo, en clases, siempre se les pregunta más a los niños, siempre se les atiende más. El consejo que les podría dar a las niñas es que rompan el miedo a la participación, a dar su opinión, a poder conversar con otras personas que no tengan las mismas opiniones; poder alimentar esas ganas de participar y vivir la vida”.